Un comentario en “¿Vivo de fuera a dentro o de dentro a fuera? 2”
Todo creyente en Jesucristo, está llamado a la santidad, invitado a imitar al Maestro; él es la Palabra, la Palabra del Padre eterno, el mensajero de la divina voluntad para el hombre.- Dios tiene un esplendido plan para la criatura humana, un maravilloso plan de salvación; porque él, el Señor, nos ama ha prepara lo mejor para el ser humano.-
Corresponder al amor de Dios para con el hombre, es tarea de todo creyente; entrar en este camino debe ser preocupación y ocupación de toda persona de fe, de todo seguidor de Jesús.- Asediado el ser humano por multitud de tentaciones y envuelto en un ambiente ajeno e indiferente a la llamada de Dios, el cristiano tiene que plantearse la vida desde la fe muy seriamente.- Organizar la propia existencia, conocer los peligros que le rodean, ser coherente a la llamada recibida, permanecer fiel a la Palabra de Dios; todo esto implica razonarse un estilo de vida desde el propio corazón, cuidando, muy mucho, las salidas y las entradas, desde dentro y desde fuera y no dormirse en los laureles, porque el tiempo está medido para todos, aunque no se trata del tiempo, se trata de la capacidad del amor que cada uno atesora en su propio corazón.-
Si a Jesús no lo encontramos en el corazón, si no lo encontramos en las situaciones de la vida real, no lo encontraremos en ninguna parte.-
Todo creyente en Jesucristo, está llamado a la santidad, invitado a imitar al Maestro; él es la Palabra, la Palabra del Padre eterno, el mensajero de la divina voluntad para el hombre.- Dios tiene un esplendido plan para la criatura humana, un maravilloso plan de salvación; porque él, el Señor, nos ama ha prepara lo mejor para el ser humano.-
Corresponder al amor de Dios para con el hombre, es tarea de todo creyente; entrar en este camino debe ser preocupación y ocupación de toda persona de fe, de todo seguidor de Jesús.- Asediado el ser humano por multitud de tentaciones y envuelto en un ambiente ajeno e indiferente a la llamada de Dios, el cristiano tiene que plantearse la vida desde la fe muy seriamente.- Organizar la propia existencia, conocer los peligros que le rodean, ser coherente a la llamada recibida, permanecer fiel a la Palabra de Dios; todo esto implica razonarse un estilo de vida desde el propio corazón, cuidando, muy mucho, las salidas y las entradas, desde dentro y desde fuera y no dormirse en los laureles, porque el tiempo está medido para todos, aunque no se trata del tiempo, se trata de la capacidad del amor que cada uno atesora en su propio corazón.-
Si a Jesús no lo encontramos en el corazón, si no lo encontramos en las situaciones de la vida real, no lo encontraremos en ninguna parte.-